Un total de 17 fábricas de China han sido cerradas por las autoridades chinas tras descubrir que no solo producían los fideos con harina de maíz sino que lo hacían con tinta y cera de parafina para comercializar sus productos a precios mas altos.
Los trabajadores de las fábricas que han sido cerradas han alegado que mas de 50 toneladas de fideos adulterados con estos productos ilegales han sido enviados al mercado ya que el negocio comenzó durante el pasado mes de Febrero.
China no solo ha protagonizado este escándalo alimenticio durante los últimos años, pues se han producido numerosos escándalos de este tipo con efectos letales como la intoxicación de 300.000 bebés por leche adulterada con melanina durante el año 2008 o la muerte de mas de cien habitantes de Panamá en 2007 tras ingerir un jarabe contaminado.
La república socialista gobernada por el Partido Comunista de China se ha convertido en un país francamente contaminado y encontrarse mercurio en pescados, carnes y verduras se ha convertido en algo habitual.